No siempre sucede pero de vez en cuando muchas parejas descubren que no pueden tener hijos. Hay muchas causas por las cuales no se pueden tener hijos pero es un punto de inflexión en la pareja. Tanto, que muchas se plantean una posible ruptura tal como aseguran muchos expertos.
La sensación de culpabilidad, baja autoestima, falta de control y una gran carga emocional pueden aparecer. Por ello es importante ponerse en manos de profesionales para poder seguir adelante en este trance.
No se puede tener hijos, ¿cómo afrontarlo?
Lo primero que se hará es tratar de aceptar esta situación tan dura, algo que no siempre se encaja correctamente. A algunas parejas, el hecho de no poder tener hijos les resulta un golpe muy fuerte.
En cambio, a otras les da más ánimo para seguir adelante y esta situación les refuerza. A otras les resulta un palo muy duro y la mejor opción es recibir ayuda psicológica. En cambio también se puede dar el caso de que se muestre incredulidad. El diagnóstico puede estar equivocado y se buscan más opiniones médicas, algo lógico.
Aunque sea difícil, lo que no se debe buscar es un culpable. Hacer que la pareja sienta que no tiene la capacidad de tener hijos es duro. Aquí hay que apoyarse y ayudarse el uno al otro, siempre. Nunca hay que culpabilizar porque puede deteriorar mucho la relación y no es bueno.
Hablar entre ambos es algo básico y muy necesario porque puede resultar de muchísima ayuda. En algunos casos muchas parejas tienden a aislarse socialmente como sistema de protección, algo que tampoco es bueno. Hay que afrontar la situación y coger al toro por los cuernos, es más normal de lo que podría pensarse.
Tener una visión compartida de la situación hará que esta sea mucho más llevadera entre los dos. El hecho de no poder tener hijos biológicamente, no quiere decir que no se pueda ser mamá y papá. Lo importante es apoyarse el uno en el otro para sobrellevar de la mejor forma esta situación.
No hay que permitir que uno de los dos, o los dos, se aísle, no sería bueno para la pareja. Es un trance por el que ambos deben pasar y deben hacerlo ayudándose entre sí. Recuerda, si tú y tu pareja no podéis tener hijos, debéis acudir a un profesional. Es algo que hay que sobrellevar siempre con un asesoramiento especializado.