Niños, ¿cómo hacer que coman de todo?

trucos para que los niños coman de todo

Todos los papás y mamás sabemos que hay muy pocos niños a los que les guste absolutamente todo lo que les ponemos en el plato. Por ello, en este artículo queremos  ayudarte compartiendo unos cuantos trucos contigo para que poco a poco vayan comiendo de todo, aunque a veces hagamos “trampa”.

Cómo hacer que los niños coman de todo

Uno de los trucos más extendidos para que los niños coman verduras es dándoles puré o incluso mezclándola con el resto de la comida. En un principio puede funcionar, pero el objetivo no es camuflarlas sino que poco a poco se vayan acostumbrando a ellas.

Lo mejor es que los niños nos vean a los padres y hermanos comer de todo, sobre todo verduras. Sabemos que los peques son como esponjas y que aprenden muchas cosas de lo que van viendo. Por ello es importante que cuando haya verduras en el menú las troceemos y que dejemos que nos vean comerlas, para que lo asocien con algo sano y rico.

Comer juntos en familia es algo muy importante, porque los niños no solamente deben vernos comer verduras sino también pescados y hortalizas, otros de los ingredientes con lo que los peques suelen tener más problemas a la hora de comer.

Leer libros de recetas infantiles o incluso programas de televisión es una buena idea para enseñarles que es muy importante comer de todo, incluso las verduras que tan poco les gustan, pero siempre se pueden preparar de forma que les guste, sobre todo si están acompañadas de buenos ejemplos, para que poco a poco vayan aprendiendo que hay que comer de todo.

Otro estupendo consejo es evitar que coman entre horas, con lo que evitaremos que engorden y que se vayan acostumbrando a comer a la hora establecida. Aunque siempre se pueden hacer excepciones y si tienen mucha hambre pueden comer snacks naturales como barritas de zanahoria, fruta, etc.

Para finalizar os queremos dejar con algo muy importante que debemos tener con los niños, incluso a la hora de la comida, paciencia, mucha paciencia. No podemos obligar a los niños a comer y mucho menos cuando no quieren hacerlo. Hacerles comprender que la comida sana es necesaria es algo vital, algo que no asimilarán en un día sino que es necesario ir poco a poco e introducir los nuevos alimentos de manera paulatina, siempre la aceptarán mucho mejor que intentar hacerles comer las cosas de manera obligada.