Se acerca la temporada de Navidad y con ella también llegan los excesos en la mesa. Puede que pensemos que por que los niños se coman unos cuantos dulces no pasa nada. Pero ya sabemos que la Navidad dura bastante más de lo que pensamos. Dulces, comidas copiosas, refrescos y demás, deben ser controlados en cierta medida.
Obviamente, no impediremos que los niños coman algún dulce que otro, pero sí hay que controlar las comidas. Lo bueno es que no es difícil hacerlo, pero lo malo es cuando los niños se niegan. Es muy fácil acostumbrarse a comer dulces, fritos y estas cosas, pero no es recomendable que sea la comida base.
Debemos ayudar alos niños a comer mejor
Solo hay que ayudarles a que no adquieran malos hábitos alimenticios. Como mamás y papás debemos preocuparnos por que coman de una manera equilibrada. Por ello, cuanto antes comencemos a darle verduras, frutas, pescado, etc., antes se acostumbrarán a ello.
Debemos apostar por que los peques tengan una buena relación con su comida, pero que también disfruten de ella. Deben aprender a comer de forma equilibrada, sobre todo gracias a nuestro ejemplo. De esta forma entre todos podremos evitar que se adapten a una mala alimentación. Así, en equipo estaremos luchando contra males como el sobrepeso, la diabetes o la hipertensión entre otros.
¿Cómo ayudarles a comer correctamente?
Dar ejemplo es uno de los pilares más importantes y por ello se recomienda comer con los hijos. Los niños son como esponjas y siempre quieren hacer lo que hacen sus referentes. Que como mamás o papás consideremos que la verdura es buena y la comamos delante de ellos, no hará que a ellos les guste, pero sí les ayudará a concebir que se trata de un buen alimento.
Es importante ir poco a poco incluyendo alimentos nuevos. Podemos hacerlo como un juego, decorando el plato, etc., la cuestión es hacerles atractiva la comida. No hay que olvidarse que de vez en cuando, concederles un capricho les gustará. Unas galletas caseras, un poco de chocolate, etc., pero nunca alimentos industriales.
Para finalizar, se recomienda que no les presionemos a la hora de comer porque no es bueno. Si los peques se sienten presionados para que coman algo, puede que se cierren en banda y no comerán. Siempre se sentirán mejor si nos ven a los progenitores comer ese alimento. ¿Vas a ayudar a tu hijo a que coma mejor?