Los primeros pasos de nuestro bebé son un hito en su desarrollo motriz, y una experiencia increíble, para ellos y para nosotros. Al principio, cuando se empiece a incorporar para aprender a andar y ponerse de pié, buscará apoyos cercanos, como los muebles, y es en esos momentos cuando podemos empezar a ayudarle y a planteárnoslo como un juego divertido y de aprendizaje para él, hasta que empiece a sentirse seguro y puede caminar torpemente, pero sólo, aunque siempre con ayuda.
Cuándo empiezan a dar sus primeros pasos
La edad en la que un bebé comienza a dar sus primeros pasos después de gatear, no está definida, y depende del crecimiento y desarrollo de cada bebé. Algunos bebés empiezan a incorporarse y a dar sus primeros pasos a partir de los nuevos meses, mientras que hay otros que no comienzan hasta los 15 meses, por lo que no existe un promedio definido de edad del bebé para empezar a caminar.
Es importante no forzarlo y que el bebé empiece de forma natural, desde el gateo a poder incorporarse. Será entonces cuando podamos emprender la aventura de ayudarle y enseñarle a caminar.
Cómo empiezan a caminar y en qué detalles debemos fijarnos
Para empezar a andar, el bebé aprenderá, de forma totalmente natural, a sostener su cuello y, si está gateando, a saber, darse la vuelta por sí mismo. Después aprenderá a sentarse y a levantarse, y también a impulsarse hacia adelante. Cuando veamos que después de un tiempo gateando, quiere incorporarse agarrándose a los muebles, será el momento en el que quieran empezar a caminar.
Querrá empezar a dar sus primeros pasos cuando algún objeto le llame la atención y no lo alcance gateando, o cuando quiera llegar a nosotros, o para alcanzar algún alimento, o imitar a niños que ya caminan por el parque. Cuando todas estas motivaciones surjan de forma natural, es cuando nuestro bebé se sentirá preparado para iniciarse en ese impulso natural de querer caminar y ser más independiente. Se caerán muchas veces, y será entonces cuando les debamos animar para que se levanten y sigan andando, con nuestra ayuda y hasta que puedan hacerlo por sí mismos.
Cómo ayudar a caminar a nuestro bebé
En líneas generales, nuestro bebé empezará a querer dar sus primeros pasos cuando haya gateado durante algún tiempo, y gateando, algún objeto le llame la atención y se agarre a los muebles para ponerse de pie. También cuando haga intentos de levantarse de la cuna, agarrándose a los barrotes, y finalmente lo consiga. Hay bebés que no pasan por el gateo durante mucho tiempo, y prácticamente (a partir de los 9 meses) ya se incorporan y quieren empezar a caminar. Si este no es el caso, es importante que gateen todo el tiempo necesario hasta que se sientan seguros, ya que el gateo es importante para coordinar movimientos, y para fortalecer sus huesos.
Para que gatee seguro, y cuando empiece a caminar no se lastime si sufre una caída, podemos utilizar alfombras para niños en tiendas especializadas, para que nuestro bebé se sienta seguro si se cae. Una buena técnica es pedirle sus manos para dejar que se apoye en nosotros, se incorpore, y empiece a caminar con ayuda, y dar paseos por casa, dejando que agarre nuestros dedos, caminando detrás de él, y siempre con apoyo hasta que se anime y se sienta seguro como para hacerlo solo.
Hay elementos como los andadores, que podemos encontrar en tiendas especializadas en bebés y niños, y que también son de mucha ayuda para que nuestro bebé comience a caminar. Instrumentos como el arnés para bebés, los andadores y demás utensilios son herramientas muy beneficiosas para su aprendizaje, y deben estar perfectamente homologadas, compradas en tiendas especializadas y cumplir todos los requisitos de seguridad.
Cuando nuestro bebé quiera empezar a caminar solo, podemos plantearle un juego, soltándole las manitas y poniéndonos cada padre en un rincón, en espacios cortos, que iremos haciendo más largos hasta que nos alcance, por sí solo, con total seguridad. Este tipo de juegos son muy motivadores para nuestro bebé, porque les resultan divertidos y al mismo tiempo aprenden en casa.
Cuando ya se decida a andar solo en casa, debemos estar muy atentos a que no se lastimo, evitando que esté cerca de picos de mesa, o de elementos que puedan hacerles daño.
Una vez que empiece a andar, e incluso antes, debemos comprarle unas botas especiales para andar, con refuerzo en el talón, para que no se lastime los tobillos. Muchas marcas especializadas tienen a la venta botitas especiales para andar por primera vez, y estos zapatos resultan absolutamente imprescindibles.
Sobre todo es importante que sepamos transmitirles seguridad, que no importa las veces que se caiga, le ayudamos a levantarse, y a comenzar de nuevo, animándole y diciéndole que lo está haciendo muy bien. Porque lo importante es que esta experiencia le guste, que se sienta seguro, y que vaya caminando cada vez con más frecuencia y seguridad. Será el momento en el que descubramos que ya no quiere gatear.
Cosas que no son recomendables
Existen actividades que se pueden hacer con los bebés, que muchos padres han realizado desde el desconocimiento, y que no son recomendables porque les pueden lastimar. Entre las principales cosas que nunca debemos hacer las más importantes serian las siguientes:
- Utilizar fulares o arneses que no estén perfectamente homologados con las medidas de seguridad obligatorias, que puedan lastimar al bebé si se cae o pierde el equilibrio.
- Intentar sentarlos cuando aprenden a incorporarse, cuando sus huesos no están totalmente formados
- Si queremos levantar al bebé del suelo, siempre debemos cogerlo por la axila y no por las manos, porque podemos provocarle un daño en las muñecas.
Y lo más importante es que no nos angustiemos porque nuestro bebé empiece a dar señales de querer empezar a caminar más tarde que otros bebés de similar edad. Será el bebé quien, de forma natural, tenga ese instinto de incorporarse y empezar a dar sus primeros pasos, sin forzarlo. Será cuando inicie su aprendizaje y podamos ayudarle, pero siempre a su ritmo.