Cómo limitar el tiempo que nuestros hijos pasan frente al ordenador

En los últimos años ha aumentado considerablemente el tiempo que nuestros hijos pasan delante de la pantalla de un ordenador. Hay muchas circunstancias que han propiciado que esto sea así: el uso generalizado de ordenadores en los colegios; la existencia de diversos dispositivos en todas las facetas de la vida de los adultos y, sobre todo, la pandemia y las clases online desde casa, un acontecimiento que ha cambiado radicalmente sus vidas y su relación con los ordenadores, con internet y con las redes sociales.

La realidad actual de los niños y los ordenadores

El ordenador se ha convertido en un elemento más de la vida cotidiana de las familias, al igual que los portátiles, los tablets, los móviles y cualquier dispositivo que requiere una conexión en Internet. Y los niños no son ajenos a este nuevo entorno virtual, aprendiendo a manejar cualquier dispositivo desde edad muy temprana y con mucha mayor agilidad y rapidez mental que un adulto.

Si bien es cierto que este nuevo entorno brinda muchos aspectos positivos para el aprendizaje de nuestros hijos, también lo es que hay que poner ciertos límites desde muy temprana edad, y educarles en la realidad de que no es la única forma de conectarse con el mundo, además de no ser la única solución para combatir el aburrimiento, en una época tan extraña como la del confinamiento.

Cómo afecta el uso de la pantalla a nuestros hijos

Usar el ordenador en exceso es una de las tendencias más destacadas de los últimos tiempos, en niños a partir de los 6 años. Han pasado de ver series de dibujos animados en televisión, a las pantallas del ordenador. Y esto trae unas consecuencias, no todas positivas.

En primer lugar, pueden tener acceso a contenido no infantil, salvo que tomemos las medidas necesarias, además de otros aspectos como dejar de hacer cosas que también les ayudan a sus desarrollo emocional y personal: los juegos, las relaciones familiares y vínculos afectivos, la lectura, el estudio o las actividades físicas, entre otras.

Aunque empezar a usar el ordenador es lo normal, en unos niños nacidos en una época cien por cien digital, los padres tenemos una responsabilidad directa sobre el tiempo de permanencia de nuestros hijos frente a un móvil, un tablet o una pantalla de ordenador, limitando el tiempo de uso y los contenidos a los que pueden acceder, y haciendo posible que entiendan por qué estas medidas son buenas para su salud emocional y para su desarrollo.

Cómo alejar a los niños de los ordenadores con éxito y sin que sea un drama

Dado que el confinamiento ha incrementado considerablemente la permanencia de nuestros hijos frente a la pantalla del ordenador, no debemos desesperarnos si no conseguimos que pasen menos tiempo ante la pantalla las primeras veces que lo intentamos.

Además, los niños aprenden con el ejemplo, por lo que también los padres tendremos que acostumbrarnos a pasar menos tiempo antes el ordenador. La clave está en proponerles otras alternativas y actividades que les resulten placenteras y apetecibles.

Salir a dar un paseo, quedar en el parque con los amigos, hacer manualidades, una buena lectura visitando una biblioteca infantil para escoger el libro más recomendable, aprender a tocar un instrumento, o aprender a jugar a algún juego de mesa, son alternativas que pueden resultar muy atractivas para niños de cualquier edad, especialmente los que ya tienen 6 o 7 años y se manejan con soltura ante cualquier dispositivo.

Es importante establecer rutinas y horarios de uso y que les quede claro cuáles son los límites horarios, incentivar que socialicen con otros niños, compañeros de colegio o de juegos en el parque, y que desarrollen aficiones desde muy temprana edad, a las que les dediquen tiempo que no van a dedicar al ordenador. Una medida que también funciona es mantener los dispositivos fuera de sus habitaciones, en el tiempo en el que saben que no deben usarlo, y apostar por juegos interactivos en su lugar.

Algunas alternativas al ordenador, que también son interactivas

Los juguetes interactivos que fomentan su participación en el juego y les permiten divertirse, entretenerse y aprender, son una buena alternativa en tiempos de aburrimiento en los que no queremos que recurran al ordenador como instrumento para pasar las horas muertas.

Hay juguetes interactivos que también se presentan en pantallas o cuentan con elementos electrónicos, que son ideales para los niños más pequeños, como los juguetes preescolares Winfun o las tables y computadoras didácticas Brincar, que son capaces de entretener y de desarrollar las habilidades de los niños, según su etapa de crecimiento. La gran mayoría de estas marcas de entretenimiento informático han desarrollado el sistema Parenting System, para ayudar a los padres a identificar las capacidades de los niños con cada juego.

Hay muchos en el mercado, y el denominador común es que todos simulan dispositivos comunes, pero están pensados como juegos interactivos con una proyección educativa.

Cómo limitar el uso de Windows 10

Limitar el uso de Windows 10, uno de los sistemas operativos más comunes en cualquier hogar, es otra de las opciones más recomendables para los padres.

Windows 10 permite añadir a familiares en la lista de personas que pueden acceder e iniciar sesión en un ordenador, y también permite añadir a personas allegadas que no son de la familia como la canguro si los cuida por las tardes. Para ello, si nuestro hijo o persona a nuestro cargo tiene correo electrónico, lo añadiremos, para que pueda iniciar sesión en nuestro ordenador, pero de forma limitada, estableciendo horarios y otro tipo de límites, como las páginas a las que pueden acceder.

Con este sistema podemos aplicar filtros a la navegación en la Web, controlar la actividad reciente, o bloquear diversas aplicaciones y juegos.

Para ello entramos en el panel de configuración, entramos en cuentas y vamos al apartado de familia y otras personas. Podremos poner un tiempo límite de horarios para cada día y establecer los límites que consideremos oportunos, para que nuestros hijos disfruten del ordenador el tiempo máximo permitido, y sin acceder a sitios no recomendables para su edad.