Para muchas de nosotras, el embarazo es una etapa preciosa de nuestra vida. Es cierto que tiene muchísimas cosas buenas, pero también alguna que otra difícil. Por ello, mamá primeriza dentro de poco, te invitamos a que sigas leyendo este artículo. Vamos a compartir contigo algunas cosas que normalmente no se suelen decir de los embarazos.
Aunque el embarazo suele pintarse de color de rosa, hay que ser realistas. En ocasiones no se pasa tan bien como se puede llegar a pensar en un principio. Sí, has leído bien, muchas veces habrás oído maravillas y lo fantástico que es estar embarazada. Pero tiene sus puntos negativos, aunque hay que decir que, no son muchos.
Puntos negativos del embarazo
Dejando de lado las molestias, dolores de espalda, piernas, cabeza y cualquier otro dolor, hay más puntos negativos. Por ejemplo, seguro que habréis escuchado muchas veces eso de que una embarazada puede comer lo que quiera. Poder se puede, pero no se deber comer cualquier cosa.
Estar embarazada no es patente de corso para darse atracones monumentales. El embarazo es una etapa que debemos controlar en todo momento. Es conveniente consultar con nuestro médico para que nos recomiende una dieta o un nutricionista.
Cierto es que se tienen más caprichos durante el embarazo, pero hay que tener cuidado. Si nos pasamos con los caprichos podemos ganar muchos kilos y después nos costará mucho perderlos. ¿Te vas a arriesgar?
Por mucho que te digan que el embarazo es lo más fácil del mundo, no, no lo es. Seguro que te lo habrán dicho para que no te pongas nerviosa. Hay momentos en los que puede que lo pases mal como cuando vayas al baño muy seguido. Puedes tener ardor de estómago, cambios de humor insoportables, indigestiones, problemas para dormir, etc.
Cada embarazo, y cada mujer, es diferente, no todas pasan por lo mismo y algunas lo tienen más fácil que otras. Pero tampoco debes preocuparte ni pensar que se trata del fin del mundo. Solamente hablamos desde la sinceridad, para que luego no ter lleves a engaños pensando que todo sería más fácil.
Otro punto negativo del embarazo, aunque no siempre sucede, es la depresión post-parto. A quienes les pasa les suele aparecer dos o tres días después de haber dado a luz. Suele durar dos semanas aproximadamente y después desaparece. No hay que olvidarse de que pueden existir casos extremos en los que puede llegar a durar meses, pero no suele ser común.