Descalzar a tu bebé hará que sea más feliz e inteligente

Todas las madres del mundo tienen el mismo dilema cuando sus hijos son pequeños: “¿le pongo zapatos a mi bebé o lo dejo descalzo? Hay quien dice con zapatos, hay quien lo contrario, ¡vaya lío! Entonces, ¿qué es lo correcto y qué no?

Pues, vamos a despejar en este artículo tus dudas, y es que un reciente estudio que tiene como nombre “Podología preventiva: niños descalzos igual a niños más inteligentes”, ha demostrado que los niños que van descalzos en su primera etapa de vida, son más felices y más inteligentes. Curioso, ¿verdad?

Adiós a esos mitos clásicos que alguien inventó “porque sí”: el de que con los pies descalzos se pilla un resfriado, el de que con los zapatos se educa, y sobre todo el de que hay que llevarlos porque es así, porque si existen unos zapatos para “pre andantes” será porque son verdaderamente necesarios.

Expliquemos entonces qué es lo que defiende este estudio de Isabel Gentil García, profesora de la Escuela Universitaria de Enfermería, Fisioterapia y Podología, de la Universidad Complutense de Madrid.

Sin zapatos los niños son más libres

Antes de los 7 meses de edad o rondando los ocho o nueve meses, los pies son incluso más sensibles que las manos. Y, ahora recuerda todo lo que un niño aprende con sus manos, ¿por qué dejarles sin ese privilegio poniéndoles zapatos en los pies durante esa época tan importante en su desarrollo?

Ahora bien, en este estudio se dice que los niños son más libres cuando antes de los 7 meses no se les ponen zapatos en los pies, ¿por qué? Pues, muy sencillo, el calzado no se justifica puesto que impide recibir las sensaciones de su alrededor. Además, añade un peso excesivo a los pies, impidiendo el movimiento fluido y natural. De hecho, puede causar hasta lesiones, porque el calzado puede causar rozaduras y demás.

Lo que pretende promover este estudio es que no hay que poner impedimentos al desarrollo de los pies de los pequeños, no hay que poner impedimentos al movimiento, todo debe ser más natural y, gracias a esto, se conseguirá mucha más libertad.

Seguro que ahora que lo estamos explicando de esta manera, el asunto tiene su lógica. Lógica que antes no eras capaz de ver o no querías ver porque alguien te dijo que si era necesario calzar a los bebés. Pero, no te preocupes, no significa que, si le has puesto zapatos a tu pequeño durante su etapa inicial, este se sienta limitado, es solo que sí que es cierto que al bebé le viene bien tener los pies libres incluso en la etapa de gateo.

Sin zapatos los niños son más felices

Por otro lado, hay que pensar en la maravillosa sensación que tienen los pequeños cuando sus pies tienen contacto con el suelo o la superficie que pisan. Hombre, lo suyo es dejarlos descalzos en casa, y cuando salgan a la calle ponerles un calcetín o un calzado flexible que proteja sus pies, pero que sea solo en momentos puntuales. El avance del niño tanto propioceptivo, neuromuscular o intelectual, es fruto de una interacción entre el ambiente y el organismo. Por lo tanto, no deberíamos ponerle barreras a este avance tan interactivo.

En la etapa pre andante el bebé debe explorar y sentir directamente todas las texturas a su alrededor, ya sean alfombras, arena, suelo, madera… Sentir todo esto, hará que el pequeño tenga más estímulos desde un primer momento, lo que derivará en un aumento de su felicidad casi de manera inmediata. Por lo tanto, se debe estimular a los niños a disfrutar de todo su cuerpo libremente y de su motricidad, y esto se hace mejor con los pies totalmente descalzos.

Seguro que no quieres privar a tus pequeños de ser más felices en su vida, ¿verdad? Así que ve pensando en dejar a un lado los zapatos. Además, piensa en el ahorro económico que esto conlleva, ¡todo son ventajas!

 

Sin zapatos los niños son más inteligentes

Ahora bien, esta es la parte más importante de todo el estudio de Gentil García, la parte de la inteligencia. ¿Cómo es posible que los niños que no llevan zapatos durante los primeros 7 meses de edad, sean más inteligentes a la larga?

Al parecer, el movimiento físico y el estímulo cuando el bebé explora las sensaciones que le ofrece el estar descalzo, acelera la madurez. Pero no solo eso, también acelera el desarrollo propioceptivo y el intelectual. Esta última parte es la más interesante, puesto que, si los pies están tapados, se está privando al pequeño de recibir toda la información táctil a su alrededor.

Además, el estar descalzos les ayuda a percibir la posición y el movimiento de sus pies en relación con el espacio. De esta percepción depende, en cierta medida, la maduración de las habilidades motoras, es decir, la coordinación visual y manual.

Quién sabe, quizá en esta era digital en la que ya pocos ponen empeño en ser inteligentes, puesto que pueden recurrir a internet en cualquier momento, sea necesario empezar por estos pequeños detalles en la infancia, ¿no crees?

Conclusión

¿Por qué existe el calzado para pre andantes cuando ni siquiera es necesario poner zapatos a nuestros pequeños en esas edades? El calzado solo debería ser necesario para cuando los pequeños comiencen a dar sus primeros pasos en adelante. Es aquí cuando necesitan más seguridad en su torpe pisada, y es aquí cuando deben tener una pisada más estable.

De hecho, el estudio de Gentil García coincide con nuestra conclusión, y lanza el dilema de por qué calzar a los pequeños cuando aún no saben caminar. Afirma a su vez que esta práctica puede perjudicar al desarrollo de los pies del bebé.

Creemos entonces que todas estas razones son más que suficientes para dejar que los niños vayan descalzos por casa, siempre que no haga demasiado frío, ¡claro! No queremos que tu pequeño se coja un resfriado por nuestra culpa.