El parto puede ser natural o por cesárea; uno de cada cuatro niños nace por cesárea. Ésta se realiza si la madre ha optado por ella para no sufrir horas y horas de trabajo de parto, o si el médico la sugiere debido a que el bebé no puede nacer de manera natural o ya se hay realizado una previamente.
La manera en que esté colocado el bebé en el proceso del parto será definitiva para decidir si se recurre a esta clase de parto:
- Si el bebé no baja o está de nalgas y la pelvis de la madre es estrecha.
- Si existen tumores que impidan el paso del bebé.
- Si la madre no dilata lo suficiente.
El proceso de la cesárea:
tarda alrededor de media hora después que se ha administrado anestesia epidural. Previamente se prepara a la madre colocando un gotero para equilibrar la presión arterial que podría bajar como efecto de la epidural; la zona púbica se rasura limpiando la piel del abdomen; además de la epidural colocada en la espalda baja, se inserta en la vagina una sonda para que la vejiga esté vacía.
Los movimientos corporales molestan después de haber dado a luz por medio de una cesárea. Los intestinos necesitan aproximadamente de una a dos semanas para funcionar normalmente y es común que se sufra de estreñimiento debido a la falta de ejercicio y por la presión del embarazo o aparición de hemorroides. Ingerir bastante fruta y fibra ayudará a aliviar estas molestias.
El médico, ginecólogo, obstetra o la comadrona te darán sugerencias para cuidarte durante los próximos cuarenta días después del parto y especialmente algunos cuidados y trucos después de una cesárea. Respecto a la herida deberás cuidarla lavándola con jabón neutro y untar una crema cicatrizante, ésta tomará un lapso de casi tres meses para cicatrizar completamente; según el tipo de piel que tengas, la cicatriz aparecerá ligeramente abultada o sentirás la piel tirante, esto también disminuirá hasta que algunos meses después podrás percibir solamente un trazo ya sea horizontal en la parte baja o vertical sobre tu abdomen, según el área en que la hayan realizado.
El mejor truco para recobrar tu figura gradualmente y sentir que tus músculos vayan recuperándose es ponerse una faja. Algunas veces el hospital provee fajas confeccionadas en material fuerte que se van atando alrededor del cuerpo; o bien puedes comprar las fajas post-parto; podría ser que la apariencia no te parezca atractiva pero su utilidad es de gran beneficio.