Cuando se es madre soltera hay que ajustar los gastos al máximo, especialmente cuando no hay demasiado presupuesto. Como madres sabemos que para llevar la economía doméstica a veces hay que hacer malabarismos. Es algo en lo que muchas de nosotras estamos especializadas. Si eres de las que no tienen muy claro cómo poder ahorrar siendo madre soltera, te invitamos a seguir leyendo.
Ahorra siendo madre soltera
Sabemos que los hijos se llevan gran parte de nuestro presupuesto, por eso debemos “hilar fino”. La intención es equilibrar los gastos cubriendo todas las necesidades no solo de los hijos sino también de la casa. Partiremos de la base de que sabemos cuánto es el dinero que ingresamos todos los meses. A partir de ahí hay que contar el dinero que gastamos, procurando anotarlo en todo momento y conocer los gastos.
Del dinero que ingresemos hay que dejar para los gastos fijos: hipoteca, alquiler, luz, etc. El dinero restante tendremos que ajustarlo al resto de gastos que tengamos. Nuestros hijos, comida, ropa, higiene, productos del hogar, etc. Si se puede debemos ir guardando un poco de dinero cada mes para cuando pueda aparecer un imprevisto.
Hacer listas, una buena opción
Para poder ajustar el presupuesto, una buena idea es ir haciendo listas. En una de ella todos los gastos que hay además de las facturas, letras, etc. A partir de esa lista hay que hacer prioridades y prescindir de lo que podamos. Seguro que te sorprenderás de lo que puedes ahorrar si decides prescindir de algunos gastos.
Buscar otras opciones para priorizar pueden ayudarnos a ahorrar dinero. Puede que nuestro operador de telefonía nos ofrezca un pack al contratar servicios fijos y móviles. Siempre nos saldrá más barato unirlo todo en una misma factura que pagarlo todo por separado.
Si tenemos una suscripción a la que no damos demasiado uso, es uno de los gastos a los que debemos decirles adiós. Además, podemos hacer las compras de una manera diferente. Quizá será mejor comprar productos de marca blanca, algo que puede permitirnos ahorrar una buena cantidad de dinero cada mes.
Los cupones de descuento pueden convertirse en unos estupendos aliados. No hay que olvidarse de utilizarlos siempre que podamos porque también nos ayudarán a ahorrar. Además de los cupones, presentar las tarjetas de fidelización de clientes de los establecimientos también debemos tenerlo en cuenta.
Recuerda que si quieres ahorrar puedes hacerlo aunque solo sea un poco, solo debes proponértelo. Busca ofertas, suprime gastos, compra marcas blancas y aprovéchate de las promociones. ¿Te animas a hacerlo?